La liposucción es una técnica en cirugía que consiste en la eliminación de grasas en determinadas partes del cuerpo para mejorar el contorno corporal. Factores como la edad del paciente, el peso o la elasticidad de la piel serán determinantes para la calidad de los resultados.
Aunque este procedimiento quirúrgico ayude a la reducción de la grasa del cuerpo, la práctica de un ejercicio regular, así como el seguimiento de una alimentación equilibrada son dos elementos fundamentales a poner en práctica después de la operación.
Hay quienes piensan que después de la liposucción, no son tan importantes los hábitos alimenticios o el deporte, y sin embargo está demostrado que se trata de dos piezas fundamentales para el buen mantenimiento de la figura.
En Navarro y Luque somos conscientes de que el paciente debe seguir una dieta saludable y organizar un plan de régimen alimenticio propio después de este tipo de operación, en el que se resaltan nutrientes como el hierro, la vitamina C, o el zinc.
- El agua y las frutas proporcionan hidratación a la piel, un punto muy importante a tener en cuenta pasada la intervención.
- El tabaco obstruye los vasos sanguíneos, por lo que se recomienda al paciente que deje de fumar, ya que podría suponerle un riesgo innecesario para la salud.
- La vitamina C favorece la cicatrización, contribuyendo a la regeneración muscular y mejora el sistema inmunológico. La naranja, el brócoli o las espinacas son alimentos ricos en esta vitamina.
- El hierro ayuda a reducir la fatiga que puede aparecer después de la operación, tonifica la piel, y mejora las vías respiratorias. Este mineral lo podemos encontrar en alimentos como la carne de vacuno, almejas, sardinas, acelgas, lentejas…
- No es recomendable ingerir bebidas con gas, comidas con alto porcentaje de grasas saturadas, alimentos fritos y muy azucarados.
Además de todo ello, el ejercicio diario y constante fortalece los músculos, previene la aparición de grasa en el cuerpo y tonifica la figura. Correr, nadar, ir al gimnasio o practicar algún deporte en general, favorece el mantenimiento del peso y de la silueta.
Por tanto, podemos decir que la liposucción es una intervención quirúrgica, con la que a través de cirujanos profesionales como los de Navarro y Luque, una alimentación regulada y una práctica de ejercicio constante, se pueden lograr los mejores resultados estéticos.